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En muchos países, en este mes se conmemora el “Día de los muertos”. En ese día, decenas de millones de personas se dirigen a los cementerios a dejar una flor de recuerdo en la lápida bajo la cual descansa un ser amado. No hay lugar en la tierra que no tenga un cementerio. Esta es la realidad de nuestro mundo: la muerte nos espera a todos.

Sin embargo, la Biblia tiene un mensaje de esperanza para cada uno de nosotros. En San Juan 1:14 leemos que el Verbo se hizo carne y “habitó” entre nosotros. Dios se encarnó para correr la suerte de los mortales. Pero detengámonos en la fuerza de esta palabra: habitar. En griego, significa literalmente “morar en una tienda”, o, si podemos transliterar ese vocablo a nuestro idioma, diríamos “tabernacular”. No hay duda de que se refiere al tabernáculo en el cual moraba la presencia divina en el desierto y en la tierra de Israel, que en Cristo halla su verdadero significado.

Apocalipsis 7:9-15 nos habla de un Tabernáculo en el cielo: “Después de esto miré, y he aquí una gran multitud. . . y clamaban a gran voz, diciendo: La salvación pertenece a nuestro Dios que está sentado en el trono, y al Cordero. . . Por esto están delante del trono de Dios, y le sirven día y noche en su templo; y el que está sentado sobre el trono extenderá su tabernáculo sobre ellos”.

¡Qué belleza y poder simbólico tienen estas palabras proféticas! La gran multitud está celebrando la fiesta, memorial del éxodo de Israel por el desierto; y con ese recuerdo, estas palabras: “Y el que está sentado sobre el trono extenderá su tabernáculo sobre ellos”.

¡Qué palabras de consuelo para tu alma fatigada por el rigor del desierto de la vida! Cierra tus ojos, y mira el desierto que has pasado, o estás pasando ahora. Cada desierto tiene la forma de la carga que cada uno llevamos a cuestas: abandonos, tragedias familiares, injusticias, enfermedad, muerte. Pero la promesa es: “Yo estoy contigo todos los días de tu vida” (ver S. Mateo 28:20). Cristo extendió, extiende y extenderá su presencia sobre ti.

El autor es editor de El Centinela

Dios mora con nosotros

por Ricardo Bentancur
  
Tomado de El Centinela®
de Noviembre 2023